domingo, 7 de octubre de 2012

LO QUE HAY QUE TENER


Actualmente nos encontramos en una situación económica complicada que ha puesto patas arriba, entre otros aspectos, el mercado laboral. Evidentemente, los que peor hemos salido, somos los jóvenes, que sin comerlo ni beberlo, nos va a tocar pagar las consecuencias de esa vida de derroche que los “adultos” han vivido.

Muchos de los jóvenes de hoy en día, están desmotivados con la situación actual, estudiamos carreras, másteres, doctorados, trabajamos como becarios durante meses,… y todo sin saber qué será de nosotros el día de mañana. Y es que pagamos carreras que cada vez son más caras, gracias a los recortes que no dejan de ser otra “solución” a esa situación de la que nosotros no somos los responsables, sin saber siquiera si nos servirá de algo. Evidentemente, no podemos perder la esperanza, per ¿cuántos universitarios están trabajando como dependientes de cualquier supermercado o en restaurantes de comida rápida como McDonalds o Burger King? o ¿cuántas veces hemos escuchado que no han contratado a alguien por estar “muy cualificado”?

Y es que todo este ciclo es como el pez que se muerde la cola. Cuando uno sale al mercado laboral con una carrera, dispuesto a comerse el mundo, llega con la extraña sensación de que el mundo se lo ha comido a él. Las empresas piden gente con experiencia, pero si acabas de salir de la carrera, rara vez tendrás experiencia en el sector. Como no dispones de este requisito no eres “digno” de ese puesto de trabajo, por lo que no tendrás experiencia.

A esto se le suma la complejidad de que no te puedes estancar mucho tiempo en esta fase hasta que la situación se mejore, ya que cada año salen cientos de universitarios como tú. Con la diferencia de que serán más jóvenes y tendrán las mismas ganas de comerse el mundo que tu tenía cuando empezaste con esta vida de “adulto”.

Pero no podemos cruzarnos de brazos y quejarnos, porque puede que seamos la generación perdida como muchos dicen, pero también somos la más preparada y con más ganas de luchar por nuestro futuro, salgamos ahí fuera dispuestos a ganar esta batalla.
Es de vital importancia contar con una buena preparación académica y con una actitud proactiva para desenvolvernos en este mercado laboral. Roma no se construyó en un día, así que tendremos que ser pacientes e ir escalando puestos poco a poco. Y aunque no guste a muchos, debemos “tienen la capacidad y los conocimientos para poder afrontar los problemas que surjan aunque no tenga relación directa con el trabajo” como indica Sergui Hinchado.

Pero no basta solo con esto, el mercado laboral, es cada vez más competitivo y los aspirantes a los puestos de trabajo, ya  no vale salir con la carrera e inglés como idioma “chapurreado”, como los otros 300 compañeros que se graduarán con nosotros. Ahora necesitamos diferenciarnos más que nunca, formarnos en distintos ámbitos con diversos cursos, y saber otros idiomas, porque el inglés ya no es un plus sino una obligación.

Por otra parte, está el tema de cómo buscar el trabajo, porque evidentemente, no va a venir a nosotros por obra de magia. A menudo nos limitamos a buscar en el periódico, pero solo el 2% de los puestos de trabajo aparecen en este soporte. 
Pero si reunimos todas las ofertas del INEM, la Administración, las bolsas de empleo, la prensa,… no llegamos ni al 30% de los puestos que anualmente se cubren en España. Por lo tanto, seamos proactivos, llevemos el currículo aunque no estén buscando a nadie, busquemos trabajando siendo creativos, hagamos que sean las empresas quienes nos necesiten.

Pero bueno, no nos vengamos abajo. Los que estamos en el mundo de la comunicación somos los más afortunados, ya que según algunos datos, “la mitad (50%) de los profesionales del marketing y la comunicación con estudios universitarios o de postgrados (93%) ha cursado una carrera directamente relacionada con el trabajo que desempeña”.
Está en nuestras manos el futuro de nuestra generación, hagamos que podamos decir que remontamos cuando nadie confiaba en nosotros y que frases como estas sean verdad.






No hay comentarios:

Publicar un comentario